miércoles, 3 de diciembre de 2008

Paradecir 20 - Liliana Celiz





Cuando los vientos de tormenta traen mensajes enigmáticos, anuncian cataclismos humanos, ¿qué hacemos con la poesía? ¿O es que los cataclismos sociales no están en cada cuadra de la urbe, desparramando dolores por los suburbios? Pareciera que los esclarecidos transmisores/creadores de realidades descubren miserias por venir (traduciendo titulares del mundo opulento) sin recordar las miserias vigentes en la inmediatez de la esquina o del otro barrio. ¿Y qué crónica escribirán los poetas sobre esta gesta de la desesperación? Vaya a saber. De momento siguen desparramándose, derramándose en el cada día. Hoy compartimos material de Liliana Celiz que ha tenido la generosidad de brindárnoslo. Bienvenida a los paradecires. Afectuosamente, Luis C. Aguirre







.A LOS QUE FUERON PAJAROS" …Imagen clandestina del pasado ( las torres no caían ni abarcaban )

cómo seguir sus pasos / cadáveres al mar

o los aviones / la peste era corriente como peste

la sed es mucha y a través palabra

quietud de la palabra cosa

o todo lo frontal el pensamiento

morir como la esquela en esos sitios

inmigración del joven que es veloz y cae

la forma habida en el sujeto

carne que niega carne y se establece en el sonido

profundidad de la madera rota como charcos

secuestro fue secuestro / monte de grasa cruda de los cuerpos volver a ver la luz cuando se apague

cargas de barro o chicle.




Para ver Paradecir 20 - Liliana Celiz completo, hacer click aquí:
http://www.4shared.com/file/74257471/88c0b730/Paradecir_20_-_Liliana_Celiz.html

jueves, 18 de septiembre de 2008

Brindemos por un grande... Richard Wright siempre estará en nuestros corazones.

martes, 26 de agosto de 2008

¿Cuál es la contraseña / de aquello que no se puede pronunciar? Paradecir 19 - María Pugliese




-Serás un puerto,
a tu pesar, un puerto
y tu mirada
una saeta fija en las orillas

¿amanece en Bahía?
¿estás de cara al sol en Cartagena?
¿quién silba por las calles neoyorquinas?

ese sendero muerto en Lima
frente al mar…

Roma y su tinte ocre al mediodía
Estocolmo y los cisnes
un silencio más alto más allá

Fui puerto,
es verdad, siempre fui un puerto
con los ojos en puntos cardinales
con las manos en barro
con algas en los pies

fui tan sólo un vasto territorio de señales

todavía
laten detrás de las persianas
ciertos mundos con fulgores de lo inhabitado
sobre mapas piel sangre cabellos

aunque persista el olor del hambre y la miseria
aunque se anuncien pestilencias paso a paso

me basta con el viento
y el vértigo
y el puerto
y las heridas




Paradecir 19 - María Pugliese, bajar número completo:

http://www.mediafire.com/?sharekey=5c02221648f40b8fd2db6fb9a8902bda

jueves, 19 de junio de 2008

Paradecir 18 - Daniel E. Serra





A veces la poesía, el arte en general, puede ser una trampa para quienes le entregan sus días. Hay quienes lo encaran como la generación de un producto más en el mercado y logran insertarse como un “decorardor” del sistema.

Hay quienes lo acomodan en sus “ratos libres”, para que su sensibilidad no interfiera en su aparato digestivo (tal vez estemos en ese grupo, al menos parcialmente).

Sin embargo hay otros que apuestan toda su energía en su cuerda creativa. A esos, a veces, la “sociedad” (esa vieja prostituta) no los perdona, trata de arrinconarlos entre los marginales. Estas palabras pretenden ser una descripción objetiva de un mundo que hemos frecuentado tangencialmente, por propia decisión y, también, por no haber sido muy bien recibidos en él.

Las voces disonantes sacuden la modorra y eso molesta. Acompañamos esta entrega con poemas que reflejan un compromiso cotidiano con la poesía, el compromiso de nuestro “compadre”, Daniel E. Serra con quien venimos caminando la vida a veces cerca, a veces no tanto, pero siempre con un encendido e insistente cariño.

Afectuosamente, Luis C. Aguirre

Para bajar el número 18:

http://www.mediafire.com/?dcdob3d1odm

miércoles, 5 de marzo de 2008

VOCES QUE NO OLVIDO -Selección de Carlos Barbarito

En 1857, a propósito de Les fleurs du mal, Victor Hugo le escribió una carta a Baudelaire en la que, entre otros conceptos, le dijo: ...vous créez un frisson nouveau... ¿En qué consistió este escalofrío nuevo? Dice J. M. Cohen en su Poetry of This Age (1908-1958): ...Baudelaire... transformó lo sobrenatural en algo interno sustituyendo las manidas almas en pena y los aparecidos por el horror de la complejidad psicológica. Aquí el nacimiento de la poesía moderna. A siglo y medio de aquellos días, este breve selección de poemas de cinco poetas esenciales del siglo pasado que no hacen sino confirmar el genio de Baudelaire y la admirable precisión de Hugo para definir un fenómeno que, mutatis nutandis, aún perdura.




CB







Anne Sexton (Norton, 1928- Boston, 1974)


La balada de la masturbadora solitaria



Al final del asunto siempre es la muerte.
Ella es mi taller. Ojo resbaladizo,
fuera de la tribu de mí misma mi aliento
te echa en falta. Espanto
a los que están presentes. Estoy saciada.
De noche, sola, me caso con la cama.
Dedo a dedo, ahora es mía.
No está tan lejos. Es mi encuentro.
La taño como a una campana. Me detengo
en la glorieta donde solías montarla.
Me hiciste tuya sobre el edredón floreado.
De noche, sola, me caso con la cama.
Toma, por ejemplo, esta noche, amor mío,
en la que cada pareja mezcla
con un revolcón conjunto, debajo, arriba,
el abundante par en espuma y pluma,
hincándose y empujando, cabeza contra cabeza.
De noche, sola, me caso con la cama.
De esta forma escapo de mi cuerpo,
un milagro molesto,
¿Podría poneren exhibición el mercado de los sueños?
Me despliego. Crucifico.
Mi pequeña ciruela, la llamabas.
De noche, sola, me caso con la cama.
Entonces llegó mi rival de ojos oscuros.
La dama acuática, irguiéndose en la playa,
un piano en la yema de los dedos, vergüenza
en los labios y una voz de flauta.
Entretanto, yo pasé a ser la escoba usada.
De noche, sola, me caso con la cama.
Ella te agarró como una mujer agarra
un vestido de saldo de un estante
y yo me rompí como se rompen una piedra.
Te devuelvo tus libros y tu caña de pescar.
El periódico de hoy dice que se han casado.
De noche, sola, me caso con la cama.
Muchachos y muchachas son uno esta noche.
Se desabotonan blusas. Se bajan cremalleras.
Se quitan zapatos. Apagan la luz.
Las brillantes criaturas están llenas de mentiras.
Se comen mutuamente.
Están más que saciadas.
De noche, sola, me caso con la cama.


(Versión de Griselda García)

Versión completa de la selección en Paradecir 17:

http://www.mediafire.com/?wjj41jt50mo

domingo, 13 de enero de 2008

ELIO ALBERTO GERARDI




HERIDA

Hay una herida del espesor del país
Los muñequitos parecen no tener fin al despeñarse.
Me aburre este morirse a cada instante de la generación.
¿los acaricio, les doy un beso, les doy un arma?,
¿los despierto o les cuento cuentos?,
¿les cuento cuentos para despertarlos? ¿?



Selección imprescindible de poemas:

http://www.badongo.com/file/733078